El poeta del Nido
Treinta y uno de Octubre. Lunes. El mes tocaba a su fin. Abría sus puertas la conmemoración de la festividad de Todos los Santos. Los relojes marcaban las 11,50. Y el árbitro daba el pitido final en el Sánchez Pizjuán. El milagro de la Resurrección había tenido lugar junto a la Avenida de Campsas City. …