Epidemias
Los enemigos del alma, según el Catecismo del Padre Astete, eran el «mundo, el demonio y la carne». Para el historiador y filósofo israelí Yuval Noah Harari, según el cual el alma, como sujeto inmortal de emociones, sentimientos, deseos, voluntad…, no es más que una «una avalancha de señales eléctricas disparadas por miles de millones …